¿Qué es la pesca recreativa?

Pescar…

Vivimos nuestras experiencias en la vida conforme a como se nos van presentando, y, posteriormente, esa misma vivencia se puede comprender de distintas maneras en función de la fase de la vida que nos encontramos.
Pará mí, se fue volviendo de a poco, muy importante pescar, y es por eso que hoy escribo un poco respecto de la pregunta que en varias ocasiones me hizo mi hijo mientras me observaba cuando estaba con la línea en el Mar. ¿Qué te pasa, Papá?.
La mayoria de las veces intente apartar la mirada, esbozando una sonrisa, y seguidamente expresé, no pasa nada. Ahora ya, en la fase en que me encuentro, puedo dar respuesta haciendo uso de una cita, y una pequeña reflexion.

“El alma es un piano de múltiples teclas”

Kandisky

El alma, vista como la definición propia del ser, de la persona. La mirada, la cara, la sonrisa, es el reflejo de ese ser. El sonido o sonidos del alma se producen como cuando se pulsa una combinación de las teclas. Los estímulos exteriores si no están en unísono, pueden llegar a provocar que se activen o desactiven teclas del piano produciendo ese sonido distinto a tu ser. Para recuperar el sonido de tu alma, deberíamos volver a nuestros inicios, a nuestros instintos. Ser consecuentes en todo momento con los principios que nos forjan, y en ocasiones, aunque parezca absurdo, siento que me acerco a este sonido persona y único, con la ayuda de una caña, la marea, el viento, el frío, los pies afirmados en piedras, y la espera de un pez.

Pase lo que pase durante una jornada de pesca, lo que sucede en esos instantes te mantiene ajeno a todo, y se genera un mundo con el agua, y se vuelven a percibir con más claridad sensaciones algo olvidadas, antiguas. No es el hecho de pescar lo olvidado, sino el vivir ese instante en pausa, y posteriormente poder recordarlo, y volver al mundo, con quienes quieres y amas, con todo lo que tu sabes que ahí sucede, y que no puedes explicar.

En muchas salidas a pescar, no logro las grandes capturas deseadas, pero siempre vuelvo de la pesca lleno de sensaciones y emociones, percibiendo que no solo he vuelto de pescar, sino hasta incluso, vuelvo a escuchar una melodia propia, con más claridad.